Mientras la alegría muda de Mario vuela alto, en la tierra seguimos trabajando día a día por arañar segundos al tiempo. Y por eso este post es especial. Está dedicado a los adictos a la esperanza, a los que se alimentan de vida, a los que se nutren de su dosis de Mario.
Observad y oid esto:
No me queda otra que dedicar mi vida a lograr para los niños con autismo tres cosas:
-diagnóstico.
-precoz.
-terapia individualizada.
Terapia, terapia, terapia...Mario ha empezado a hablar. Despacio, muy despacio. Repite palabras, se interesa por el mundo, lee en voz alta los cuentos de Dita y Dito señalando cada picto como un tesoro...
Todo, fruto del amor, la constancia y la terapia diarios.
Estas felicidades se entremezclan con el día a día. Y el autismo sigue presente, ¡por supuesto que sí! Esta semana hemos venido de vacaciones a un sitio donde se supone que nunca llueve. Anticipamos a Mario el taxi, el avión, el autobús, el hotel, el cuarto nuevo, la playa, la crema de protección...Todo menos la lluvia cuando el plan previsto era la playa. Y hoy ha amanecido lloviendo, imposible hacer ningún plan y Mario insistiendo en ir a la playa. Era inviable, así que hemos ido a pasar la mañana a un centro comercial, previo picto dibujado a mano, pero, hoy es domingo, ¡bingo! El centro comercial estaba cerrado.
Once de la mañana, Mario ya muy nervioso, la petite idem, solución...alquiler de coche y nos hemos ido a pasar la mañana al único reciento cubierto donde esparcir nuestros bodies que se nos ha ocurrido: ¡la terminal de llegadas del aeropuerto! Tiene de todo, aviones, autobuses, taxis y escaleras automáticas. Pero Mario estaba ya muy descuadrado y enseguida nos hemos vuelto al hotel. Seguía lloviendo pero la temperatura no era del todo mala (sniff) así que...¡al agua patos!
Una hora y media más tarde han aparecido los chicos de vuelta, morados de frío pero con una sonrisa infinita dibujada en sus rostros.
Y al rato ha salido el sol.
Y hoy el sol ha seguido luciendo cuando Mario ha dicho, por primera vez, a iniciativa suya....
"Te que ro mu sho mamá", "Te que ro mu sho papá"...a buen entendedor, poquitas palabras bastan...
Enhorabuena Amaya!!, tengo lágrimas en los ojos de imaginar a Miguel diciéndonos algo así, de verdad ENHORABUENA
ResponderEliminarAy, cuánto me alegro!!!
ResponderEliminarYo también tengo lágrimas de emoción de leerte... felicidades y mucha alegría para ustedes!
ResponderEliminarES LA PRIMERA VEZ QUE LEO TU BLOG, Y ESTOY LLORANDO DE EMOCION.
ResponderEliminarFELECIDADES POR SUS NUEVAS PALABRAS, DEBES DE ESTAR ORGULLOSÍSIMA.
ANIMO.
ME ALEGRO POR VOSOTROS; YO TAMBIÉN ESTOY MUY EMOCIONADA. VUESTRO TRABAJO ESTÁ DANDO MUY BUENOS RESULTADOS. ENHORABUENA Y ADELANTE. BESITOS
ResponderEliminarOle Ole OLe, y yo otra vez llorando de la emoción. Me alegre por vosotros y estoy segura que este niño conseguirá muchas cosas, como sus padres.
ResponderEliminarGracias por este video, los avances de Mario son la esperanza de nuestros avances futuros. Todos queremos ver a un Mario dentro de poco.
ResponderEliminarBesos,
Helga
Hola, Amaya.
ResponderEliminarDespués de leer todas las entradas de este diario tan vital, solo puedo responder con unas sencillas palabras:
Sois una familia como muchas. Sois una familia como pocas.
Todos somos Mario.
Un abrazo.
Hola Amaya.
ResponderEliminarSomos un grupo de estudiantes de educación especial de la universidad de Granada.Nos recomendaron visitar su blog una compañera de clase, ya que estamos haciendo una página web sobre autismo y nos gustaría incluir su blog en ella ya que nos ha parecido muy interesante porque es un caso real, si a usted no le parece mal. Nuestro email es especialistasespeciales@gmail.com y el enlace de la página se lo adjuntamos a continuación:
http://pinodecolores.webnode.es/
Esperamos su contestación, un saludo y gracias.
Amaya estoy leyendo tu blog y no solo te felicito tengo que darte las gracias por la gran lección que nos estas dando.
ResponderEliminarMario esta calando muy dentro de mi y he pedido tu libro para mi y para regalarlo a alguien que le va a hacer mucho bien.
Adelante Amaya estoy contigo y con Mario
Manuel
Hola Amaya, he comprado tu libro en la peluquería de Pamplona, por suerte quedaba un ejemplar. Aunque como me he llevado el último, estaría bien que repusieras el stock con unos cuantos ejemplares más!
ResponderEliminarMe ha encantado tu libro y el blog.
Admiro mucho todo lo que trabajas para que Mario sea lo más feliz posible y por mejorar la vida de muchas otras personas.
Seguiré atenta a tu blog. Un abrazo